La Cultura Metro es hoy uno de los símbolos más queridos de Medellín, pero su origen se remonta a mucho antes de que el sistema iniciara la operación comercial.
Hace 38 años comenzó a gestarse un modelo de gestión cultural y social que transformó la relación de los ciudadanos con el transporte público.
¿Ha escuchado la expresión, dejar salir es ingresar más fácil y rápido, "evita pisar o sobrepasar la línea amarilla", "el botón rojo solo se usa en caso de una emergencia"? Esa es la Cultura Metro.
En medio de las dificultades propias de levantar un proyecto de tren para la ciudad, surgió la idea de fortalecer el vínculo emocional de los habitantes con esta iniciativa. El sueño del metro despertó amor y sentido de pertenencia por un sistema que traería modernidad y nuevas oportunidades a Medellín.
Con el tiempo, fueron los mismos usuarios quienes empezaron a utilizar y consolidar este término. Fue una expresión espontánea que reflejó la manera distinta en la que se comportan dentro del sistema.
La cultura metro sigue siendo un ejemplo de cómo la movilidad puede trascender la infraestructura y convertirse en un proyecto social. Es una muestra de que el transporte puede unir, educar y dignificar a una comunidad entera.
¿Cómo surgió la Cultura Metro, el proyecto que transformó la forma de usar el transporte?
Visite además:
