Nuevamente en el búnker de la Fiscalía los cerca de 200 detenidos que hay recluidos, protagonizaron un motín para llamar la atención de las autoridades y exigir su traslado, pues algunos, llevan más de 90 días allí.
Los uniformados e investigadores que custodian a los detenidos del Búnker se vieron obligados a solicitar apoyo de otras unidades, luego de que estas personas forzaran las rejas de sus celdas y arremetieran contra sus custodios.
De acuerdo con la Policía, esto se debe a las condiciones de hacinamiento, alimentación y sanidad en las que se encuentran los detenidos, así como por el hecho de no poder recibir visitas y de no estar separados por delitos y grupos delincuenciales.