En los últimos 105 años nuestro país ha vivido diferentes sucesos que han marcado de alguna manera la historia de la sociedad colombiana, desde el final de la guerra de los mil días en 1902 y otro hechos, enmarcan el nacimiento de don Luis Horacio Espinoza Hernández, naciendo el 18 de abril de 1916, el mismo mes que el expresidente Carlos E.Restrepo retorna a la política como escritor público y periodista, además de dirigir en Medellín la revista Colombia.
Un hombre de origen humilde, trabajador y echado pa lante, que nació en el municipio de Pueblo Rico, Antioquia, el hijo mayor de una seguidilla de 10 hermanos de los que actualmente solo vive su hermano menor con 92 años.
Don Luis Horacio, aunque ya cuenta con las dosis dispuestas de la vacuna en esta pandemia, quería celebrar la gesta de su cumpleaños con bombos y platillos, hacer una reunión nutrida con su familia 7 hijos, 13 nietos, 21 bisnietos, y 2 tataranietos, pero ante la nueva normalidad, se conformaría con ver su historia en la televisión.
Su determinación y carácter noble se resalta en las historias que cuenta, de las cuales siempre resalta la importancia de trabajar y luchar para tener algo en que descansar sobre nuestro paso en la vida, aunque también recuerda con agrado sus épocas de conquista
En Colombia según el censo del Dane en el año 2018 la población con más de 100 años es de un 0,02% mujeres que corresponde a 9.651 y 0,01% hombres con un total aproximado de 4.825 habitantes.
La foto de su compañera, Tereza de Jesus Zuleta Zapata, su eterna enamorada que lo acompañó hasta hace 5 años, vivió hasta los 104 años; una de sus más grandes conquistas, en la que encontró la motivación para seguir trabajando y luchando.
Un hombre de gran ejemplo para sus hijos, un hombre que llegó desde Pueblo Rico para instalarse en Itagüí y seguir siendo de inspiración para sus generaciones.
Hoy Luis Horacio llega a 105 años, ya no con la misma energía con la que emprendió en su juventud y arribar al sur de la ciudad, pero sí con un amor inmenso por su familia que lo mantiene vivo sorteando algunas patologías y siendo testigo de lo que pasa en este mundo, tal vez ese es su secreto mejor guardado para seguir conquistando años.