Bajo tres aspectos se pueden calificar los 100 días de Andrés Julián Rendón en la Gobernación de Antioquia. La lucha contra el hambre, la jornada extendida en colegios y el derribo de viviendas que sean utilizadas para la venta y el consumo de estupefacientes.
Con el desplome de 18 viviendas, en el municipio de Amagá, inició el cumplimiento del compromiso hecho en campaña de derribar las estructuras utilizadas para el consumo y la comercialización de estupefacientes.
Para el gobernador de Antioquia, la atención especial la necesitan los dos millones de antioqueños que no cuentan con recursos para las necesidades básicas, quienes están pasando hambre. A través de una ordenanza, la Asamblea Departamental le autorizó destinar el 100% del impuesto vehicular para la lucha contra el hambre.
Otro de los compromisos trazados y que comenzó a implementar durante los 100 días, son las jornadas extendidas para los niños con clases de robótica e inglés. Además, el punto de mayor atención ha sido la “vaca”, la iniciativa de invitar a los antioqueños a que donen dinero para terminar las vías 4G.
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