Pico y placa Medellín

icon
-
icon
-

Un paseo terminó en tragedia

A nueve se elevó anoche el número de personas muertes después de que un bus escalera rodara por un precipicio en una carretera del cañón del Combeima, en el departamento del Tolima.

El vehículo, de carrocería en madera, lo que al parecer agravó la situación por el desprendimiento de su estructura, llevaba a bordo a 19 ocupantes. Las autoridades, pese a las víctimas fatales, celebran el hecho de que el número de muertos no fuera mayor.

Al parecer, las pésimas especificaciones de la carretera, con curvas pronunciadas, en terreno escarpado, sin recubrimiento de asfalto ni señales de tránsito, todo eso sumado a unas condiciones climáticas adversas, de lluvia y neblina, provocaron que el conductor perdiera el control del bus y rodara por una pared de roca y vegetación, sobre un vacío de 300 metros, hasta el lecho del río Combeima. El que hayan sobrevivientes es un milagro.

El coronel Javier Herrera, comandante de la Policía Tolima, confirmó que el número de heridos es de 10 y que los médicos confían en su recuperación pese a la gravedad de las heridas de algunos de ellos.

“El saldo es trágico: 9 ciudadanos muertos y otros 10 están heridos. Al parecer todo ocurrió porque el conductor trató de esquivar una roca que cayó había caído en la vía”, explicó el oficial. Pero las víctimas podrían ser más.

Miembros de la Cruz Roja y la Defensa Civil que se encuentran en el sitio del siniestro mantienen la búsqueda de al menos otras cinco personas que harían parte de la excursión y de cuya suerte aún no se sabe nada.

El bus viajaba con empleados de la Universidad Surcolombiana y sus familias, que se desplazaron desde Neiva para una jornada de integración. Según las autoridades y el propio relato de los sobrevivientes, el grupo de viajeros regresaban de una tarde de descanso en unos baños termales de la región cuando se produjo el accidente.

“El bus tenía que hacer dos viajes con pasajeros desde lo termales hasta el Hotel Iguaima donde estábamos hospedados. Nosotros llegamos en el primer viaje y el conductor se devolvió por el otro grupo. Pero la información que nos entregan es que en la bajada el bus se fue a un abismo”, dijo María del Pilar Osorio, una de las funcionarias de la universidad que se salvó.

[Alianza con El Mundo]