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Bogotá, mar 26 (EFE).- Los guerrilleros de las FARC recluidos en un presidio de seguridad de Bogotá aseguraron que "Manuel Marulanda Vélez", fundador y jefe máximo de su guerrilla fallecido hoy hace tres años, "sigue y seguirá vivo sembrando semillas de libertad".
El líder rebelde "cerró sus ojos (...) luchando por construir una patria mejor", aseguraron los insurgentes en una declaración divulgada en internet por la Agencia de Noticias Nueva Colombia (Anncol), que suele difundir mensajes y documentos del grupo armado.
El septuagenario "Manuel Marulanda Vélez" o "Tirofijo", alias de Pedro Antonio Marín, murió de una afección cardiaca el 26 de marzo de 2008 en algún lugar de las selvas del país, según lo anunciado dos meses después del deceso por el mando central de las FARC, que designó como su sucesor a Guillermo León Sáenz ("Alfonso Cano").
En la declaración, los "prisioneros políticos de guerra" recordaron que Marín fundó la organización rebelde en 1964, con 43 hombres y mujeres, tras una ofensiva contra la "república independiente" que, según los militares, había establecido en la región del suroeste del país en la que se había asentado.
"Su inigualable capacidad militar lo llevó a consolidar un Ejército guerrillero nacido de las entrañas del pueblo colombiano", aseguraron los rebeldes presos, internados en un pabellón de alta seguridad de la Penitenciaría Central de la Picota.
En una breve semblanza de Marín, los presos escribieron que él afrontó desde siempre la persecución de las "dictaduras civiles conservadoras" y la "violencia oficial", lo que lo obligó a recorrer cordilleras, atravesar ríos caudalosos e internarse en las selvas profundas de su país.
"Pero así como entendió la necesidad de levantar las armas (...), el camarada Manuel supo interpretar también la importancia de explorar caminos de paz con Justicia social", según los presos, que indicaron que "de allí que no claudicara en la búsqueda de una salida dialogada a conflicto social y armado".
La declaración está suscrita por Bernardo Mosquera Machado ("Negro Antonio"), el más prominente líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que permanece detenido en el país.
Mosquera, segundo al mando del Frente "Antonio Nariño", fue detenido a finales de febrero de 2009 en una zona de páramos cercana a Bogotá, dentro de una operación militar en la que murieron diez rebeldes y un militar, y se rescató a un secuestrado.
