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Tras más de 30 diligencias de allanamiento las autoridades desmantelaron una estructura criminal al servicio del Clan del Golfo y cuyas ganancias, producto de la venta de estupefacientes, ascendían a los 200 millones de pesos.
Ciudad Bolívar y Betania, dos poblaciones del suroeste antioqueño, fueron las zonas escogidas por la estructura delincuencial los Guayacanes, para comercializar estupefacientes entre sus habitantes.
Según la Fiscalía, producto de la venta de estupefacientes, esta estructura criminal que además es señalada de instrumentalizar menores, recaudaba más de 200 millones de pesos al mes.
Durante el operativo en el que también participaron patrullas aéreas, fueron incautadas 4 armas de fuego, 267 gramos de sustancias psicoactivas y 13 celulares.
