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Hacer un uso eficiente de la energía depende en buena medida de un manejo adecuado de los electrodomésticos. Tenga en cuenta que los que más consumen son aquellos que demandan una gran cantidad de potencia para generar calor.
La nevera por ejemplo, tiene recomendaciones especificas como no utilizarla para secar prendas en la parte de atrás, no desconectarla y no abrirla y cerrarla constantemente pues esto incrementa el consumo de energía de la misma.
Los electrodomésticos viejos pueden generar un consumo mayor de energía, el ahorro de uno moderno puede ser de hasta un 15% en la cuenta de servicios.
Tenga en cuenta que hay aparatos que generan un consumo fantasma de energía, estos son los que permanecen conectados sin que se esté haciendo uso de ellos.
