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Una individualidad de Erik Lamela le bastó a Argentina para celebrar en su debut en el Mundial. Si bien su rendimiento no fue el más óptimo desde lo planteado por Perazzo, la albiceleste logró festejar ante un rival que en todas las categorías los sabe complicar.
El técnico argentino comentó que sus jugadores tuvieron tiempo para alegrarse por los primeros tres puntos, pero reconoce que lo más importante para el grupo está en el partido de hoy. “Quise que los muchachos disfrutaran del triunfo frente a México porque venían con mucha ansiedad”.
Desde que se conformaron los grupos y se supo que había duelo ante los ingleses, asegura Perazzo, este se convirtió en el primer reto del Mundial para los argentinos.
“Ahora llega Inglaterra que es una rivalidad que está en la piel de la Argentina, y aunque estos muchachos son muy jóvenes, ya la perciben y la viven desde el momento en que sabían que los ingleses estaban en nuestro grupo”, manifestó.
Y es que si se trata de partidos históricos ante Inglaterra, Argentina tiene de sobra. Solo es recordar el inolvidable 2-1 en el Mundial de México 86’ cuando, de “La mano de Dios”, los albicelestes se clasificaron a las semifinales.
La historia
Walter Perazzo afirmó que la mejor terapia para sus dirigidos, es hablarles de aquellos grandes encuentros que enfrentaron a estas dos selecciones.
“No le voy a hablar a mis jugadores de las Malvinas o algo así, si he de hablar de historia, prefiero lo deportivo, por eso si les hablo de partidos históricos, tendría que mencionar los de Argentina e Inglaterra, y principalmente el de 1986 que es uno de los grandes partidos de la historia mundial”.
Respecto a su rival, Perazzo no tuvo mucho para decir porque asegura que con solo el primer partido, poco se puede saber. “Es que en la primera fecha no se puede hacer mucho análisis porque la mayoría de equipos toman muchas precauciones, además está el nerviosismo del debut, la ansiedad, todo eso que vive uno dentro de una cancha”, explicó.
Sin lugar a dudas, Argentina es gran favorita en el Mundial. Su técnico y jugadores desde su llegada a Medellín, afirmaron no tener ninguna presión que los acobardara. Por el contrario, la consideran positiva.
“Es que Argentina, por los antecedentes, tiene el favoritismo del público y de los medios, y nosotros mismos queremos ser protagonistas de este Mundial”, concluyó Perazzo.
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