Gladys Niño tiene 80 años y desde hace 10 llegó al Dormitorio Social Gerontológico Continental, ubicado en Parque Berrio, en búsqueda de apoyo para sobrevivir. Su pasatiempo es escribir.
En un pequeño locker, al lado de su habitación, guarda bajo llave los fragmentos de un libro que escribió, aún está en manuscrito.
La pandemia y el encierro llegó para cambiarle la vida a ella y a decenas de adultos mayores que duermen en este centro administrado por la Alcaldía de Medellín.
Con esta estrategia, los adultos mayores empezaron a recibir clases de pintura y escritura, reviviendo en ellos esa habilidad por el arte, que creían habían perdido.
Con los cuentos y dibujos escritos durante cinco meses de encierro, lograron obtener el primer libro “Diarios de una cuarentena”, que recopila el trabajo hecho por más de 10 adultos mayores.
Sin embargo, los recursos sólo les dio para imprimir dos ejemplares y ninguno puede quedarse con la copia de su obra de arte. Ahora, buscan que con donaciones puedan obtener más libros.