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Luego de la aprobación inicial del proyecto de Ley de reforma tributaria estructural, han surgido grandes preocupaciones entre los sindicalistas, principalmente por el desequilibrio entre el aumento del IVA y el salario mínimo.
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En su primer debate en el Congreso fue aprobada la reforma tributaria estructural. La iniciativa contempla un incremento en la tarifa general del IVA del 16 % al 19 %, uno de los puntos que más preocupa a los trabajadores.
Los productos básicos de la canasta familiar no tendrán IVA, sin embargo algunos sindicalistas, consideran que con el poco aumento que tendría el salario mínimo, será necesario llegar a acuerdos laborales directamente con los empresarios el año entrante.
Uno de los puntos que no fue aprobado por el Congreso, fue el de aumentar la base gravable. El impuesto de renta lo seguirán pagando las personas naturales que generen ingresos a partir de 3 millones 500 mil pesos, esto con el fin de no perjudicar a la clase trabajadora.
El Gobierno espera recaudar $6.2 billones con la reforma tributaria para 2017, un billón menos de lo pronosticado, esta reducción se debe a la no aprobación en el incremento de los impuestos a las bebidas azucaradas.
